Tras casi una década de relación, seis años de compromiso y una hija en común, la cantante Katy Perry y el actor Orlando Bloom confirmaron su separación. A través de un comunicado difundido por medios como People, sus representantes informaron que la pareja ha estado reconfigurando su vínculo en los últimos meses, con el objetivo de centrarse en la crianza compartida de su hija Daisy Dove, de cuatro años.

Pese a los rumores persistentes, ambos habían mantenido sus compromisos públicos: Bloom asistió solo a la boda de Jeff Bezos y Lauren Sánchez, mientras Perry continuó con su gira musical en Australia. Durante su último concierto, la artista se mostró visiblemente afectada. Días después, Bloom compartió en redes sociales reflexiones sobre la soledad, citando al psiquiatra Carl Jung.

Aunque nunca contrajeron matrimonio, Katy Perry y Orlando Bloom se comprometieron en 2019 y anunciaron el embarazo de su hija en 2020. Fuentes cercanas indicaron que la cantante está dolida, pero aliviada de evitar un nuevo divorcio. La separación ocurre además en un momento complicado para la carrera de Perry, cuyo más reciente álbum no ha tenido el recibimiento esperado.

Con esta decisión, ambos artistas aseguran que seguirán viéndose como familia y que su prioridad seguirá siendo el bienestar y la estabilidad emocional de su hija.