Van por “El R1”, operador del CJNG señalado como autor de la orden para matar a Carlos Manzo
Las investigaciones por el asesinato del alcalde de Uruapan, Carlos Manzo, apuntaron directamente a Ramón Ángel Álvarez Ayala, alias “El R1”, uno de los operadores regionales del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) en Michoacán. El secretario de Seguridad y Protección Ciudadana federal, Omar García Harfuch, confirmó que este líder criminal habría dado la orden para ejecutar el homicidio, según testimonios de los detenidos y evidencia digital analizada por las autoridades.
El señalamiento central provino de Jorge Armando “N”, conocido como “El Licenciado”, quien fue detenido en Morelia y es considerado uno de los autores intelectuales del crimen. En sus declaraciones, identificó a “El R1” como su jefe inmediato y el responsable de instruir a la célula del CJNG que operaba en la zona. De acuerdo con Harfuch, el grupo no solo planeó el ataque, sino que dos días antes ya había intentado asesinar a Manzo en una gasolinera.
El día del homicidio, el 1 de noviembre, el ataque fue ejecutado por un joven de 17 años, reclutado y presuntamente drogado por integrantes del CJNG. Además del menor, participaron dos jóvenes que posteriormente fueron encontrados muertos en la carretera Uruapan–Paracho. La investigación ha permitido reconstruir los pasos del grupo criminal mediante testimonios y mensajes recuperados de dispositivos asegurados.
La Secretaría de Seguridad federal informó que, tras capturar a “El Licenciado” y a otro integrante de la célula, el siguiente objetivo prioritario es detener a “El R1”, quien junto a su hermano “R2” opera en varios municipios de Michoacán y mantiene vínculos históricos con “El Mencho”. Ambos fueron figuras clave en la estructura del CJNG desde 2012, cuando participaron en los narcobloqueos que permitieron la fuga del líder del cártel.
García Harfuch subrayó que, pese a declaraciones públicas que sugieren motivaciones políticas, no existen indicios que involucren a funcionarios en el caso. Reiteró que la investigación avanza con evidencia técnica y sin especulaciones. Mientras continúan los operativos en Michoacán, la captura de “El R1” es considerada clave para cerrar el caso y desarticular la célula responsable del asesinato.



