La definición sobre la posible liberación anticipada de Javier Duarte volvió a posponerse. Tras una audiencia que se extendió por casi doce horas, la jueza de ejecución Ángela Zamorano decidió diferir la resolución para el viernes 21 de noviembre, argumentando la complejidad del expediente y las controversias planteadas por ambas partes. El exgobernador de Veracruz permaneció en sala durante toda la diligencia, en la que la Fiscalía General de la República (FGR) insistió en que sigue representando un riesgo procesal y social.

Durante su intervención, Duarte acusó a la FGR de montar un “circo mediático” alrededor de su caso. Reprochó, entre otros señalamientos, que el Ministerio Público utilizara publicaciones hechas desde su antigua cuenta de X —a las que asegura no tener acceso desde 2016— para atribuirle amenazas contra el exsecretario de Finanzas, Tarek Abdalá. También cuestionó que el fiscal Manuel Granados hablara de un supuesto desvío de 60 mil millones de pesos sin que exista una reparación del daño ni pruebas que respalden esa cifra.

La FGR presentó seis testigos para sustentar su oposición a la liberación, incluidos funcionarios de Veracruz y de la Fiscalía de Asuntos Relevantes. El Ministerio Público recordó además que, aunque ya fue sobreseído, existió un proceso por desaparición forzada en el que —según su versión— Duarte tuvo que ser “inmovilizado” para llevarlo ante la autoridad. La defensa reviró que el exgobernador sufrió una baja de presión en ese momento y que fue sometido de manera indebida.

Al término de la audiencia, el abogado Pablo Campuzano acusó a la Fiscalía de actuar con mala fe y de presentar información desactualizada para influir en la decisión judicial. Sostuvo que las pruebas presentadas por la defensa demuestran que Duarte cumple con los requisitos para acceder a la liberación anticipada, luego de haber compurgado el 95% de la sentencia que recibió por asociación delictuosa y lavado de dinero. Aseguró confiar en que la jueza resolverá a favor de su cliente.

Este es el segundo aplazamiento del procedimiento, luego de que la audiencia del 11 de noviembre también se difiriera por las declaraciones de testigos y argumentos sobre la seguridad de Antonio Tarek Abdalá, pieza clave en los procesos contra Duarte. Con el nuevo receso, será este viernes cuando se determine si el exgobernador de Veracruz puede abandonar prisión tras nueve años de condena o si deberá permanecer bajo resguardo federal.