La investigación por el asesinato del exalcalde de Uruapan, Carlos Manzo, dio un giro clave con la detención de Jorge Armando “N”, señalado por las autoridades como uno de los autores intelectuales del ataque perpetrado durante el Festival de la Vela. El secretario de Seguridad, Omar García Harfuch, confirmó que el detenido pertenece a una célula criminal subordinada al líder del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), Ramón Ángel Álvarez Ayala, alias El R1.

De acuerdo con el Gabinete de Seguridad, Jorge Armando “N” habría organizado y ordenado la agresión a distancia mientras tres jóvenes ejecutaban la operación en el sitio. El tirador, un menor de 17 años identificado como Víctor Manuel Ubaldo, fue abatido por escoltas del alcalde instantes después del ataque. Los otros dos participantes, Fernando Josué “N” y Ramiro “N”, aparecieron muertos días más tarde, en lo que las autoridades consideran un intento de sus superiores por borrar pruebas y cortar el hilo de responsabilidades.

El avance de la investigación fue posible gracias al hallazgo y análisis de los teléfonos de los agresores. En ellos, los agentes encontraron un chat grupal donde se coordinó paso a paso el asesinato: desde la vigilancia previa, la ubicación exacta de Manzo, hasta las órdenes directas para disparar sin importar quién lo acompañara. En los mensajes, Jorge Armando “N” aparecía identificado como el Licenciado, la voz de mando que supervisaba cada movimiento.

El material recuperado también reveló que los jóvenes reclutados habían sido entrenados por Ramiro, quien fungía como enlace directo con el presunto autor intelectual. Videos y fotos enviadas al chat muestran cómo el grupo ajustó posiciones alrededor de la plaza minutos antes de la agresión. Tras el ataque, los sospechosos intentaron huir, pero terminaron siendo víctimas de una presunta “limpieza interna” ordenada por la misma organización criminal.

Las autoridades han señalado que la detención de Jorge Armando “N” no cierra el caso. García Harfuch advirtió que continuarán las capturas para desmantelar la estructura responsable no solo del asesinato de Manzo, sino también del reclutamiento de menores, las extorsiones y otras actividades delictivas en Michoacán. “Este crimen no quedará impune”, afirmó.