Tras el ataque armado que cobró la vida de una comandanta y dos policías en San Salvador Huixcolotla, el gobierno de Puebla determinó que la Secretaría de Seguridad Pública estatal y la Secretaría de la Defensa Nacional asumirán el control de la seguridad en el municipio. La medida busca restablecer el orden luego de las amenazas dirigidas al alcalde, Manuel Alejandro Porras Florentino.

El titular de la SSP, Francisco Sánchez González, informó que el operativo de relevo ya está en marcha y que el estado tomará el mando directo de las fuerzas locales. “Es necesario que tengamos control de la situación por parte del estado”, enfatizó, al tiempo que anunció el fortalecimiento de las acciones operativas y de inteligencia en la región.

La decisión se da luego de que ocho de los 22 elementos de la Policía Municipal presentaran su renuncia tras recibir amenazas, situación que dejó prácticamente inoperante a la corporación local. Las agresiones contra los agentes ocurrieron la madrugada del 3 de noviembre, dejando tres víctimas mortales y un policía herido.

Sánchez González, vicealmirante en activo de la Secretaría de Marina, señaló que hasta antes del ataque no se tenía registro de solicitudes de apoyo por parte del Ayuntamiento. Enfatizó que el objetivo ahora es recuperar la tranquilidad en Huixcolotla mediante una presencia sostenida del Ejército, la Guardia Nacional y la Policía Estatal.