Congreso de Puebla pide a Profeco frenar abusos de precios tras afectaciones por tormenta Jerry

Integrantes de la Comisión de Desarrollo Económico del Congreso de Puebla aprobaron un exhorto dirigido a la delegación estatal de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) para que implemente operativos de verificación en los municipios afectados por la tormenta tropical Jerry. El objetivo es evitar incrementos desproporcionados e injustificados en los precios de productos y servicios básicos durante la contingencia.
La diputada del PVEM, Guadalupe Vargas Vargas, impulsora del punto de acuerdo, denunció que en diversas comunidades se han detectado aumentos exorbitantes en los costos de artículos de primera necesidad, así como en servicios de gas, combustible y transporte. Advirtió que estas prácticas afectan directamente la economía de las familias damnificadas y contravienen el artículo 10 Bis de la Ley Federal de Protección al Consumidor, que prohíbe el alza injustificada de precios ante fenómenos naturales o emergencias.
El exhorto también recuerda que estas acciones no sólo representan una falta administrativa, sino que pueden constituir delitos contra la economía pública, de acuerdo con el artículo 253 del Código Penal Federal, que sanciona el acaparamiento, la ocultación o la negativa injustificada de venta de bienes esenciales con penas de tres a diez años de prisión y multas de hasta mil días.
Durante la sesión, las y los diputados coincidieron en que la Profeco debe actuar con firmeza para garantizar el abasto de productos básicos como alimentos, gas LP, gasolina y diésel, fundamentales no solo para la vida cotidiana, sino también para las labores de auxilio, comunicación y reconstrucción en las zonas afectadas.
Finalmente, Guadalupe Vargas enfatizó que la especulación de precios en contextos de emergencia es una práctica predatoria y éticamente reprobable, que agrava el sufrimiento de las familias y obstaculiza su recuperación. Por ello, reiteró que la vigilancia de Profeco debe ser inmediata y sostenida hasta que las condiciones económicas en las regiones damnificadas se estabilicen.