¿Censura en el Pentágono? Grandes medios rechazan nuevas reglas para la prensa

The New York Times, The Associated Press, The Washington Post, The Atlantic y la cadena Newsmax se negaron a firmar un nuevo documento impuesto por el Departamento de Defensa de Estados Unidos, el cual establece condiciones más restrictivas para el acceso de periodistas al Pentágono.
Los medios consideran que la medida representa una amenaza directa a la libertad de prensa y a la protección que otorga la Primera Enmienda de la Constitución estadounidense. Según los lineamientos, el secretario de Defensa, Pete Hegseth, podría revocar el acceso a reporteros que soliciten información, clasificada o no, que no haya sido previamente aprobada para su divulgación.
La política también limita la libre circulación de periodistas dentro de las instalaciones del Pentágono, exige escoltas en ciertas áreas y condiciona la permanencia de los corresponsales a la firma de un reconocimiento por escrito. Quienes no lo firmen deberán entregar sus credenciales y abandonar el edificio.
El portavoz del Pentágono, Sean Parnell, defendió la medida al señalar que se trata de “procedimientos de sentido común” y que el acceso al Pentágono “es un privilegio, no un derecho”. En contraste, organizaciones periodísticas y académicas calificaron las reglas como vagas y posiblemente inconstitucionales.
“La política sugiere que informar algo no aprobado por el gobierno es un acto que daña la seguridad nacional. Eso simplemente no es cierto”, advirtió David Schulz, director de la Clínica de Libertad de Medios y Acceso a la Información de la Universidad de Yale.
El jefe editorial del Times en Washington, Richard Stevenson, afirmó que los ciudadanos “tienen derecho a saber cómo operan el gobierno y el Ejército”, recordando que los contribuyentes destinan casi un billón de dólares anuales al gasto militar.
El presidente Donald Trump ha mantenido una relación tensa con la prensa, impulsando demandas y medidas contra varios medios, entre ellos The New York Times, Wall Street Journal, ABC y CBS, además de buscar restringir fondos a servicios públicos de información como Voz de América y Radio Free Europe.