La familia Ellison emerge como nueva dinastía mediática en Estados Unidos.; críticos advierten riesgo para la democracia

El magnate tecnológico Larry Ellison, cofundador de Oracle, y su hijo, el productor de Hollywood David Ellison, han dado un salto en el poder mediático tras concretar la compra de Paramount y proyectar adquisiciones que incluyen a Warner Brothers Discovery, HBO y CNN.
Con vínculos cercanos al presidente Donald Trump, los Ellison buscan consolidar un imperio que, según analistas y críticos, podría rivalizar con el de los Murdoch y concentrar un peso inédito sobre la información y el entretenimiento en Estados Unidos.
El grupo de vigilancia mediática FAIR advirtió que el control simultáneo de cadenas como CBS y plataformas como TikTok representaría “un peligro para la democracia”, mientras legisladores demócratas, incluida la senadora Elizabeth Warren, han pedido frenar las fusiones por considerarlas una amenaza de concentración de poder.
Pese a las advertencias, los Ellison defienden sus movimientos como un proyecto empresarial centrado en la creación de contenido. En Wall Street, la eventual fusión de Paramount y Warner Brothers genera expectativas por el alcance que daría frente a gigantes como Disney y Netflix.