Trump confronta a la ONU: “Sus países se están yendo al infierno”

En un discurso cargado de confrontación en la Asamblea General de la ONU, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, declaró que los 193 países miembros “se están yendo al infierno” debido a la migración no controlada. Aseguró que solo podrán “salvarse” si trabajan de la mano con Washington, mensaje que contrastó con los llamados a la cooperación global hechos previamente por líderes como António Guterres y Luiz Inácio Lula da Silva.
Trump aprovechó su intervención para desacreditar las políticas internacionales de atención a migrantes y calificó el cambio climático como un “engaño”, insistiendo en que los países que se mantengan en el marco de la energía verde “fracasarán”. En tono desafiante, defendió su política de fronteras cerradas y las medidas antimigrantes implementadas en su gobierno.
El mandatario también lanzó ataques directos contra la ONU, a la que acusó de ser una institución de “palabras huecas” incapaz de resolver conflictos. Incluso ironizó sobre fallas técnicas en el recinto para subrayar su desprecio hacia la organización, a la que responsabilizó de no actuar en guerras en Medio Oriente y Europa.
En su repaso por América Latina, Trump justificó el bombardeo de embarcaciones en costas venezolanas bajo el argumento del combate al narcotráfico, lo que generó críticas por violar el derecho internacional. Además, defendió al expresidente brasileño Jair Bolsonaro y aseguró que “Brasil solo mejorará cuando trabaje con Estados Unidos”, en abierta confrontación con la administración de Lula.
Con un discurso de más de una hora, Trump se presentó como el único líder capaz de imponer orden mundial, atribuyéndose el fin de “siete guerras” en sus primeros meses de mandato y reiterando que su visión de seguridad y fronteras estrictas es la única vía para evitar el caos global. Sus declaraciones fueron recibidas con críticas por su tono intolerante y por contradecir el consenso de la mayoría de la comunidad internacional.