El periodista y analista político Genaro Fausto Lozano Valencia fue ratificado por el Congreso de la Unión como embajador de México en Italia, en una acción impulsada por la presidenta Claudia Sheinbaum. La Comisión de Asuntos Políticos e Internacionales otorgó su aprobación con 12 votos a favor, dos en contra y cero abstenciones. Posteriormente, el pleno de la Comisión Permanente validó el nombramiento con 25 votos a favor y nueve en contra.

Con estudios en Ciencia Política (máster y doctorado en The New School for Social Research) y Relaciones Internacionales (ITAM), Lozano ha sido profesor en el ITAM y en la Universidad Iberoamericana desde 2007. También es activista en derechos humanos y ha ofrecido conferencias en instituciones como Harvard, Chicago, Columbia y UNAM.

Durante su comparecencia, presentó un plan orientado a fortalecer la relación diplomática y comercial con Italia, incluyendo la reactivación de la comisión bilateral, promoción cultural y turística, cooperación educativa y académica, y atracción de inversiones, especialmente hacia el sureste mexicano.

El nombramiento generó críticas desde la oposición (PAN y PRI), quienes consideraron que Lozano carece de experiencia en el Servicio Exterior Mexicano y cuestionaron su imparcialidad política.

Este nombramiento representa un giro en la política de designaciones diplomáticas, apostando por perfiles civiles con visibilidad pública, académica y compromiso con derechos sociales, en lugar de diplomáticos de carrera.