La Fiscalía General y la Policía Nacional de Ecuador lograron desarticular un centro de llamadas clandestino ubicado en Quito, que operaba una red de extorsiones telefónicas dirigidas a personas en México, Colombia y Ecuador. El operativo culminó con la detención de 40 personas involucradas en esta estructura criminal.

Las investigaciones revelaron que la organización estaba liderada por dos ciudadanos chinos, quienes utilizaban datos personales de las víctimas para intimidarlas mediante el envío de imágenes manipuladas, con el objetivo de obtener pagos bajo amenaza.

El centro de llamadas funcionaba con sofisticados métodos para engañar y presionar a los afectados, quienes recibían llamadas constantes y mensajes amenazantes, generando un ambiente de temor y vulnerabilidad en las víctimas.

Con esta acción, la Fiscalía y la Policía Nacional refuerzan su compromiso en la lucha contra la delincuencia organizada y la protección de la ciudadanía frente a modalidades de extorsión cada vez más sofisticadas.