Alejandro Armenta, gobernador: Una cita con la historia | Historias de un joven reportero
“Si conocieras el tiempo tan bien como yo, no hablarías de perderlo”, le dice apresurado, como siempre está, el conejo blanco mientras sostiene su reloj a Alicia, en la legendaria novela del escritor británico Charles Lutwidge Dodgson, mejor conocido como Lewis Carroll.
Alejandro Armenta es un político, igual que el Conejo Blanco de “Alicia en el País de las Maravilla”, obsesionado con el tiempo.
Su cronómetro, ese con el que tanto ha trazado su ruta de vida que siempre apuntó a la titularidad del Ejecutivo poblano desde hace 25 años cuando inició su carrera política en la presidencia municipal de Acatzingo, en el ya muy lejano 1993, por fin marcó el día uno de su gobierno.
La cita con la historia alcanzó al nacido en Izúcar de Matamoros.
Con una sonrisa en el rostro, que jamás pudo ocultar desde el primer segundo del sábado, y rodeado de su núcleo familiar, Alejandro Armenta rindió este fin de semana protesta como gobernador constitucional de Puebla, un sueño al que se aferró, trabajó y luchó desde hace casi tres décadas.
La emoción jamás abandonó al cuerpo de ese hombre al que la frase “ser útil, ser agradecido y ser acomedido”, son su bandera y pilares con los que prometió conducir su gestión, que busca convertirla en el mejor gobierno en la historia de Puebla.
¿Cómo planea esto el gobernador de Puebla?
Su visión de estado, la “Puebla del futuro”, como él mismo la definió, es un compilado de 26 promesas que conducirán al estado a la vanguardia, la productividad y un lugar entre las mejores entidades del país y de Latinoamérica.
En presencia de más de 20 mil invitados, entre la cúpula nacional de Morena, representantes del gobierno federal de Claudia Sheinbaum, coordinadores parlamentarios de la 4T, así como colaboradores y simpatizantes, el gobernador Armenta presentó su visión de estado a cumplir durante los dos mil 192 días que dure su mandato.
Desde ya, Armenta Mier comenzó la cuenta regresiva al 13 de diciembre del 2030, fecha en la que habrá de cumplir su gobierno.
“Puebla será el Sillicon Valley, de América Latina”, aseguraron dos personajes creados con Inteligencia Artificial que presentaron un resumen de logros alcanzados por Alejandro Armenta cuando su reloj en retroceso marque ceros.
Durante una hora y diez minutos, el mandatario poblano juró frente a su padre Rafael Armenta que trabajará con “Amor a Puebla” y que “Pensar en Grande” será la primicia incansable con la que guiará todos sus esfuerzos como titular del Ejecutivo local.
El segundo día de gobierno del gobierno de Armenta comenzó a tambor batiente.
El gobernador de Puebla entregó 50 patrullas a la Policía Estatal, como una de sus primeras acciones de gobierno.
Desde la explanada del CIS, el mandatario encabezó el pase de lista a elementos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP).
El fondo de este su segundo acto oficial como mandatario está llenó de muchos simbolismos: la seguridad será la principal tarea que atenderá su gobierno para regresarle la paz y la tranquilidad que desde hace muchos años perdimos los poblanos.
Como lo hizo en el Centro Expositor tras rendir protesta en la nueva sede del Congreso del estado, el gobernador Armenta reiteró que trabajarán de manera coordinada con Omar García Harfuch, secretario de Seguridad a nivel federal.
La coordinación entre la federación y el estado será permanente y total.
El reloj de Armenta ya corre en retroceso.
Su cita con la historia por fin llegó.
Al gobernador de Puebla le quedan dos mil 190 días para convertir a su gobierno en el mejor en la historia del estado.
El juramento hecho por el mandatario poblano frente a su esposa, Cecilia Arellano, sus hijos Alex, Ceci y Cristy, y su papá Rafa, debe tomarse más que en serio.
Alejandro Armenta no le piensa fallar, como lo prometió, ni a su familia ni a los poblanos.
El sueño de 25 años por fin se hizo realidad.
“Para llegar a algún lugar, primero debes saber a dónde quieres ir”.
Mario Riestra, nuevo líder del PAN en Puebla
El panismo poblano dio un golpe de timón un día después de la unción de Alejandro Armenta como gobernador de Puebla.
Y es que el Consejo Político Estatal de Acción Nacional por una mayoría abrumadora eligió a Mario Riestra como su presidente por los próximos tres años, es decir, la primera mitad del sexenio de Armenta Mier.
El “cambio de rumbo” (frase que identificaba a Eduardo Rivera y su grupo) del panismo poblano de la mano de Riestra Piña y Genoveva Huerta llenó de nuevos bríos al partido azul, pues esto marca el regreso del morenovallismo a la dirigencia estatal y el destierro de esta del Yunque.
Ahora falta conocer qué oposición encabezará Mario Riestra, si una cómoda y acomodada frente al gobierno de Armenta, o una combativa, crítica y férrea.
Ya lo veremos.
@GerardoRuizInc