En un hito histórico para México, tras 200 años de historia, una mujer llega a la titularidad del Ejecutivo para elevar a rango constitucional un principio fundamental: la igualdad sustantiva de género celebró la diputada de Morena Claudia Rivera Vivanco.

En este sentido, hizo hincapié que la Cuarta Transformación se comprometió a promover la igualdad sustantiva de género como una obligación ineludible. Esta decisión –dijo- responde a los compromisos asumidos por la Presidenta de la República Claudia Sheinbaum Pardo, quien ha señalado que la erradicación de la violencia contra las mujeres y la reducción de la brecha salarial de género son fundamentales para garantizar el desarrollo justo y equitativo de México.

La morenista consideró que con la aprobación por unanimidad de este dictamen se concreta una de las piedras angulares de la Cuarta Transformación, que busca cambiar profundamente la estructura social, política y económica del país, garantizando derechos fundamentales a las mujeres y erradicando las barreras de desigualdad que aún persisten.

“La igualdad sustantiva de género, que por años fue una promesa no cumplida, será ahora un mandato constitucional en México. Esta medida asegura que todas las personas, sin importar su género, puedan gozar de las mismas oportunidades y derechos en todos los ámbitos de la vida.”

“Este avance no solo es una victoria legal, sino un compromiso firme con las mujeres, niñas y adolescentes del país, quienes históricamente han enfrentado la violencia, la discriminación y la inequidad”, añadió la diputada por Puebla.

Rivera Vivanco pormenorizó que con las reformas a nuestra Carta Magna se establece que el Estado mexicano garantizará el goce y ejercicio pleno de la igualdad sustantiva para las mujeres, reconociendo que la igualdad de derechos no es suficiente sin una equidad real.

Entre otras cosas, el Estado asumirá su responsabilidad de proteger a las mujeres, niñas y adolescentes de todas las formas de violencia, poniendo énfasis en la violencia de género y las agresiones sexuales, que han aumentado en las últimas décadas.

La diputada también celebró que quedará estipulado que los nombramientos de las personas en cargos públicos deberán respetar el principio de paridad de género, impulsando la participación equitativa de mujeres y hombres en la toma de decisiones políticas y administrativas.

Otra de las bondades es la erradicación de la brecha salarial que será efectiva a través de la implementación de mecanismos para reducirla brecha por razones de género, un paso decisivo para asegurar que las mujeres reciban una remuneración justa por su trabajo, sin distinción de género, agregó. Es de destacar que con la entrada en vigor de las reformas cada entidad federativa tendrá la obligación de contar con fiscalías especializadas para investigar y sancionar los delitos cometidos contra las mujeres por razones de género.