Adán en el infierno | Tremores



Tremores

Tremores. Aunque salió sonriente y saludando de la conferencia de prensa que ofreció para explicar lo del supuesto crédito, al presidente municipal de Puebla, Adán Domínguez, se le nota tenso, serio, y algunos dirían que hasta preocupado. Y cómo no si la andanada de críticas, cuestionamientos y dichos sobre la situación financiera de la Comuna fue brutal. El gobernador electo, Alejandro Armenta; el mandatario en funciones, Sergio Salomón; el alcalde electo, Pepe Chedraui; legisladores locales y federales, regidores actuales y futuros… En fin, todos con una misma consigna: transparencia. Al edil sustituto lo han dejado solo, ni quien le heredó el puesto ha dicho nada. Y aún peor: contrario al tesorero municipal, Omar Coyopol, dijo tener “otros datos”. En fin, ahora el equipo de transición tendrá que hacer de sabueso para encontrar la lana, pues hasta no tenerla en las manos, no sabemos si existe.

¿O no?

Sergio Salomón al gabinete

Lo dijimos en este espacio el pasado 12 de agosto (aquí en este enlace, la prueba), el gobernador Sergio Salomón Céspedes Peregrina estaba en el ánimo del ahora expresidente Andrés Manuel López Obrador y la mandataria Claudia Sheinbaum Pardo. En radio pasillo sonaba con constancia su designación, pero había la duda si la presidenta de México esperaría a diciembre para nominarlo, o Céspedes Peregrina pediría licencia para irse a un encargo federal. Pues ya resuelto este dilema, el oriundo de Tepeaca de Negrete arribará al Instituto Nacional de Migración el 15 de diciembre, después de entregar la estafeta a Alejandro Armenta. Pero no sólo eso, la decisión de Sheinbaum Pardo tiene jiribilla: está esperando a que termine la investigación al actual titular de la dependencia, Francisco Garduño, por la muerte de migrantes en Ciudad Juárez, y no como dicen, que ya fue exonerado. Así que también estará planchado ese asunto cuando llegue el poblano.

¿O no?

Puebla, reflejo del desánimo

No, no es un tema político, sino deportivo. Sí tendría que preocupar la baja venta de boletos para el partido de la Selección Mexicana de Fútbol contra el Valencia CF (por cierto, en zona de descenso). A la fanaticada poblana no la engañan tan fácil, va a ser un partido molero, de esos que no tienen trascendencia ni emociones. Para muestra, los organizadores están haciendo promociones, como el 2×1, a ver si con eso llegan más aficionados que a un partido de La Franja. Por lo pronto, en la página de la empresa que vende las entradas, no están habilitadas tres de las rampas características del Estadio Cuauhtémoc, y sólo está la Oriente disponible. Y esto tendría que poner a pensar a la Federación Mexicana que las cosas tienen que cambiar. Sí o sí. Pero ¡Ya!, porque el Mundial está a la vuelta de la esquina. Un tuit muestra el nivel de desesperación.

¿O no?

Editor: Fabián Sánchez

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