La UPAEP desarrolló un modelo de inteligencia artificial orientado a evaluar el riesgo sísmico y la vulnerabilidad estructural de edificaciones en Puebla, una de las zonas con mayor actividad telúrica del país. La herramienta combina sensores especializados y análisis de datos instrumentales para anticipar el comportamiento de los inmuebles ante un sismo y reducir el riesgo de pérdidas humanas y materiales.

Pedro Díaz Bermúdez, director de la Facultad de Ingeniería Civil, explicó que el modelo permite detectar fallas estructurales antes de que ocurra un evento sísmico, lo que facilita decisiones sobre reforzamiento, diseño y actualización de normas de construcción. El objetivo, dijo, es pasar de una reacción posterior al desastre a una estrategia preventiva basada en evidencia científica.

Los investigadores Eduardo Ismael Hernández y Gerardo López Arciga señalaron que el mayor riesgo no es el sismo en sí, sino la vulnerabilidad de edificaciones mal diseñadas o con mantenimiento deficiente. Alertaron que la falta de memoria social frente a eventos sísmicos incrementa la exposición al peligro, por lo que insistieron en la necesidad de mantener sistemas permanentes de monitoreo y evaluación.

Desde la década de 1990, la UPAEP ha generado información técnica que ha contribuido a la actualización de reglamentos de construcción en Puebla. Con este nuevo modelo, la universidad busca fortalecer esa labor y consolidarse como un referente en ingeniería sísmica con enfoque social y preventivo.

Durante la presentación del proyecto, realizada en el marco de los aniversarios de los sismos de 1985 y 2017, autoridades estatales y organismos profesionales coincidieron en que la incorporación de inteligencia artificial en la gestión del riesgo es clave para construir ciudades más seguras. En un país donde se registran decenas de movimientos telúricos cada día, la prevención tecnológica se perfila como una herramienta indispensable.