Una aeronave de la Secretaría de Marina (Semar) que realizaba una misión de apoyo médico internacional presentó un incidente durante su aproximación al Aeropuerto Internacional Scholes, en Galveston, Texas, mientras operaba en coordinación con la Fundación Michou y Mau, dedicada a la atención de menores con quemaduras.

De acuerdo con la información oficial, tras registrarse el percance se activaron de inmediato los protocolos de búsqueda y rescate, en coordinación con autoridades locales y federales de Estados Unidos. El evento se mantiene en desarrollo y continúa bajo atención de las instancias correspondientes.

Reportes locales señalan que la aeronave intentaba aterrizar en condiciones de densa niebla, cuando se precipitó en una zona ubicada al norte del aeropuerto, cerca de la calzada que bordea la bahía de Galveston. La Guardia Costera de Estados Unidos recibió el aviso del accidente alrededor de las 15:15 horas, indicando que varias personas se encontraban en el agua tras el impacto.

En el vuelo viajaban dos pilotos y seis pasajeros, entre ellos un paciente pediátrico con quemaduras, que sería trasladado a un hospital especializado en Galveston. Los primeros reportes de los servicios de emergencia confirmaron el despliegue de equipos de buceo, ambulancias y personal médico, así como el traslado de víctimas a un hospital local. Al menos una de las personas lesionadas era menor de edad.

Datos de seguimiento aéreo identifican a la aeronave como el vuelo ANX1209, correspondiente a un Beechcraft King Air 350i, un avión turbohélice bimotor utilizado por la Armada de México para misiones de transporte, apoyo humanitario y vigilancia. La plataforma Flightradar24 registró que el vuelo partió de Mérida, Yucatán, y desapareció del radar durante la fase final de aproximación sobre la bahía, alrededor de las 15:02 horas.

Los registros de aviación indican que el avión no había realizado vuelos internacionales en el último mes, y que previamente había operado en distintas entidades de México, lo que confirma que este traslado representaba una misión humanitaria excepcional hacia territorio estadounidense. La investigación del incidente quedó a cargo de las autoridades de seguridad de Texas, mientras se solicitó a la población evitar la zona para no interferir con las labores de emergencia.

En una ficha informativa, la SEMAR actualizó a las 20:35 horas el saldo de las personas involucradas: dos personas con vida, una sin localizar y cinco fallecidas.