El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, provocó una fuerte polémica este lunes tras atribuir públicamente el asesinato del actor y director Rob Reiner y de su esposa, Michele Singer Reiner, a la postura política crítica que el cineasta mantuvo durante años contra su figura. La declaración fue difundida en una publicación en redes sociales mientras las autoridades de Los Ángeles continúan investigando el caso como un aparente homicidio.

De acuerdo con información citada por CNN, la pareja fue hallada sin vida el domingo en su residencia, con indicios de haber sufrido heridas de arma blanca. En el marco de la investigación, su hijo Nick Reiner fue puesto bajo custodia policial para determinar su posible responsabilidad en los hechos.

La reacción del mandatario estadounidense se apartó del tono habitual que suelen adoptar los jefes de Estado ante tragedias de este tipo, al incluir señalamientos políticos sin respaldo de las autoridades encargadas del caso. El mensaje generó una oleada de críticas, incluso entre legisladores republicanos, quienes consideraron inapropiado politizar un crimen en proceso de investigación.

Entre las voces críticas se encontraron legisladores conservadores que señalaron que el asesinato de una figura pública y su esposa debía abordarse con respeto y prudencia institucional. Algunos subrayaron que el contexto político no debe interferir en el tratamiento de una tragedia familiar ni en el curso de una investigación penal.

Rob Reiner fue una figura influyente de la industria cinematográfica estadounidense, con una trayectoria que abarcó décadas como actor, director y productor, además de una participación activa en causas políticas progresistas. Su muerte ha generado conmoción tanto en el ámbito cultural como en el político, mientras el caso continúa bajo investigación de las autoridades locales.