Catorce mexicanos que cumplían condenas en prisiones de Estados Unidos fueron entregados a México para terminar aquí sus sentencias. Los reclusos habían sido declarados culpables de delitos como tráfico de drogas, posesión ilegal de armas o ambas conductas, informó el Departamento de Justicia estadounidense. La transferencia ocurrió el pasado 5 de diciembre bajo las reglas del Tratado Internacional de Transferencia de Prisioneros.

De acuerdo con autoridades estadounidenses, todos los internos solicitaron voluntariamente su traslado. Tras el análisis de los expedientes y el aval de ambos gobiernos, se autorizó que continuaran su reclusión en México para cumplir la parte restante de sus penas.

El Departamento de Justicia detalló que este programa internacional permite que personas de nacionalidad extranjera recluidas en prisiones estadounidenses —federales o estatales— puedan ser enviadas a su país de origen, siempre bajo criterios específicos. Actualmente, Estados Unidos mantiene vigentes 10 acuerdos bilaterales y dos convenciones multilaterales para realizar estos traslados con más de 85 naciones.

Ese mismo día, México también transfirió a Estados Unidos a tres ciudadanos estadounidenses condenados en territorio mexicano por delitos relacionados con sustancias controladas. Las sentencias pendientes para estos individuos van de 22 meses a cuatro años y medio de prisión, según la información oficial.

Las autoridades de ambos países señalaron que estos intercambios buscan facilitar la reinserción social de las personas sentenciadas, permitiéndoles cumplir sus condenas en su entorno cultural y lingüístico, sin alterar la duración de las penas dictadas por cada nación.