Expertos del Consejo Mexicano de la Carne (Comecarne) advierten que factores como la plaga del gusano barrenador y el cierre de fronteras de Estados Unidos al ganado mexicano están elevando los precios de carne de res y cerdo, a pesar del programa Paquete Contra la Inflación y la Carestía (Pacic). Según datos del sector, entre enero y octubre, el precio de la carne de res subió 15.1%, el de cerdo 9% y el pollo 7.4%.

La organización alertó que se prevé eliminar el arancel cero a importaciones de carne de res y cerdo, sustituyéndolo por cupos de importación —aunque no se ha definido cuántas toneladas se podrán importar ni cuándo—. Para 2025, se habían importado cerca de 100 mil toneladas de res y cerdo, cifra que ayudó a moderar el incremento de precios.

Comecarne señaló también que los ganaderos enfrentan mayores costos de traslado, nuevas restricciones sanitarias y logísticas, además de tener que mantener más de un millón de cabezas de ganado que no pueden exportar, lo que presiona la oferta. Según sus estimaciones, mientras que en 2025 podría crecer el consumo de res en 3.3% y de cerdo en 5.7%, en 2026 se proyecta una caída de consumo de res del 3.1% y un nuevo aumento en cerdo del 6.1%.

La organización urge mantener el arancel cero a las importaciones y evitar cupos que puedan agravar la escasez, con el fin de contener el impacto sobre costos, logística, bienestar animal y precios al consumidor.