Feministas alertan intento de López Zavala por manipular la narrativa del caso Monzón y piden intervención de Sheinbaum
Colectivas feministas que acompañan el caso de Cecilia Monzón denunciaron que Javier López Zavala, señalado como autor intelectual del feminicidio, estaría impulsando una estrategia mediática para sembrar dudas sobre su responsabilidad, pese a que los procesos judiciales en su contra siguen avanzando entre amparos y retrasos. Las activistas advirtieron que esta maniobra busca desplazar del centro a la víctima y reposicionar al acusado en la conversación pública.
Ante este escenario, las organizaciones anunciaron que llevarán el caso ante la presidenta Claudia Sheinbaum, con la intención de visibilizar la situación en espacios nacionales, incluida la conferencia matutina. “Tenemos que llegar a todos lados hablando sobre Cecilia Monzón”, expresó Yali Figueiras, de la Red Latinoamericana de Mujeres en Política.
Las colectivas exigieron a la Fiscalía General de la República impedir que avance la denuncia de López Zavala contra el ministerio público Tonatiuh Gutiérrez, quien encabezó las investigaciones iniciales. Aseguraron que se trata de una acusación infundada que intenta revertir el sentido del proceso y presionar a las instituciones. Llamaron también a los medios de comunicación a no replicar versiones que revictimizan y distorsionan los hechos.
Durante su posicionamiento, las activistas recordaron que las suspensiones y diferimientos acumulados en los juicios abren espacios para que el acusado busque influir tanto en el ámbito judicial como en el mediático. Advirtieron que esta combinación compromete la memoria de Cecilia Monzón y vulnera el derecho de las mujeres a una justicia efectiva y sin dilaciones.
Finalmente, las organizaciones presentes —entre ellas Madres Exigiendo Justicia, Feministas de Izquierda 19 de Marzo y Huellas Violeta— insistieron en que el Estado mexicano debe actuar con debida diligencia. Subrayaron que no es normal la magnitud de violencia feminicida que vive el país y señalaron que el caso Monzón está atravesado por redes políticas que han permitido el retraso de sentencias. “Estamos aquí porque hay resistencia”, concluyó Figueiras.




