Desde el penal federal “El Altiplano”, Jorge Armando “N”, conocido como “El Licenciado”, negó pertenecer a algún grupo criminal tras su detención, atribuida a su presunta participación en el homicidio del exalcalde Carlos Manzo Rodríguez, ocurrido durante un evento público en Uruapan. Según su versión, vive de manera honesta, dedicándose a obras públicas y a servicios de asesoría, basados en su formación profesional en Ciencias de la Comunicación y Periodismo.

Durante su declaración, que duró 16 minutos, el detenido denunció trato de incomunicación y tortura: afirmó haber sido obligado a grabar audios y fotografiado bajo presión. No obstante, en su testimonio no abordó directamente las acusaciones en su contra ni aceptó responsabilidad alguna en el crimen.

Autoridades federales, por su parte, indican que el arrestado había intercambiado mensajes en un chat grupal con el joven que disparó contra Manzo, así como con otras dos personas presuntamente involucradas, identificadas como “Ramiro N.” y “Josué N.”. Ambos fueron encontrados sin vida días después del ataque. Según la versión oficial, “El Licenciado” habría identificado a “El R1” como su superior, quien habría dado la orden del asesinato.

También fue detenido un hombre apodado “El Pelón”, señalado de reclutar al autor material del ataque, así como a los escoltas que recibieron cargos por homicidio por omisión al no proteger al edil.

La detención y las declaraciones de “El Licenciado” abren un nuevo capítulo en la investigación, mientras familiares de la víctima y autoridades esperan que la Fiscalía presente pruebas concretas, como evidencias periciales, comunicaciones o testimonios, para sostener la acusación.

Dato adicional verificado: En 2024, más del 80% de los homicidios de autoridades municipales en México quedaron sin resolución judicial, según datos del Observatorio de Homicidios de Autoridades Locales. Este contexto subraya la presión social y política por esclarecer casos como el de Manzo.