Aumentan muertes de motociclistas en Puebla: Ayuntamiento propone uso obligatorio de cascos certificados
El incremento de accidentes mortales entre motociclistas ha encendido las alarmas en Puebla; en lo que va de 2025, 23 personas han perdido la vida en la capital, mientras que a nivel nacional la cifra ronda las 4 mil víctimas anuales, lo que convierte a este sector en uno de los más vulnerables en el tránsito urbano.
De acuerdo con el subsecretario de Movilidad, Norman Campos Velázquez, los motociclistas representan el 26% de las muertes viales en México. El funcionario subrayó que esta problemática no solo afecta a Puebla, sino que refleja una tendencia nacional impulsada por el crecimiento acelerado del parque vehicular, que en la última década se ha cuadruplicado. Entre 2017 y 2022, el número de motocicletas registradas aumentó un 89%, generando un repunte proporcional en los siniestros.
Frente a este panorama, el Ayuntamiento de Puebla, encabezado por Pepe Chedraui Budib, ha puesto en marcha un plan integral de seguridad vial en coordinación con el Instituto de Políticas para el Transporte y el Desarrollo (ITDP). Las acciones incluyen infraestructura más segura, sincronización de semáforos y rehabilitación de intersecciones con alta incidencia de accidentes, como la 35 Norte y Prolongación Reforma, la 18 de Noviembre y Calle H, o la 31 Poniente y Bulevar 5 de Mayo.
Campos Velázquez también advirtió sobre la venta de cascos no certificados, conocidos como “bacinito”, que no ofrecen protección real y, en algunos casos, agravan las lesiones en caso de impacto. “El casco no es un accesorio externo, es parte de la motocicleta y debe usarse todo el tiempo que se conduzca”, enfatizó. Estudios internacionales señalan que el uso de cascos certificados puede reducir hasta en 39% las muertes por accidentes viales.
Ante ello, el funcionario adelantó que se presentará una iniciativa para hacer obligatorio el uso de cascos certificados en la capital poblana. La propuesta será discutida en la Comisión de Movilidad y posteriormente turnada al Cabildo de Puebla, como parte de una estrategia para fortalecer la seguridad vial y frenar la creciente cifra de víctimas entre motociclistas.




