Inseguridad divide al Congreso de Puebla: entre reclamos, gritos y acusaciones políticas
El tema de la inseguridad volvió a encender los ánimos en el Congreso de Puebla. Lo que comenzó como una solicitud para que el titular de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), Francisco Sánchez González, compareciera de forma anticipada ante el pleno, terminó en un intercambio de reclamos, acusaciones y gritos entre diputados de Morena y la oposición.
La tensión escaló cuando el panista Rafael Micalco Méndez subió a tribuna para pedir que el funcionario estatal rindiera cuentas sobre la estrategia de seguridad, tras el asesinato de tres policías en Huixcolotla. Sin embargo, la mayoría morenista bloqueó la petición, lo que provocó la molestia de las bancadas del PAN y del PRI, que acusaron al bloque oficialista de cerrar el debate y “negar la realidad de la violencia” que vive el estado.
Desde el lado priista, la diputada Delfina Pozos Vergara exigió que el alcalde de Huixcolotla, Manuel Alejandro Porras Florentino, acudiera también a rendir cuentas sobre la certificación de los elementos policiales. Pero su intervención fue interrumpida abruptamente cuando le apagaron el micrófono en medio del intercambio de gritos con la morenista Azucena Rosas Tapia, quien la acusó de “buscar titulares” y de lucrar políticamente con el tema.
Rosas Tapia defendió la estrategia del gobierno estatal y aseguró que la oposición solo busca “desacreditar al gobernador Alejandro Armenta”. A su vez, el morenista Andrés Villegas Mendoza revivió los casos del pasado al señalar que durante los gobiernos panistas se disparó el robo de combustible y recordó los vínculos del exsecretario de Seguridad, Facundo Rosas, con Genaro García Luna.
El enfrentamiento dejó roto el pacto de civilidad entre las bancadas. Mientras Morena cerró filas para respaldar la política de seguridad de la actual administración, PAN y PRI advirtieron que insistirán en que el secretario de Seguridad Pública comparezca antes del informe del gobernador. La sesión terminó entre reclamos cruzados que fracturaron el diálogo político en Puebla.



