Jane Goodall, reconocida investigadora y defensora del medio ambiente, murió a los 91 años por causas naturales, informó el Instituto Jane Goodall. Su trabajo transformó la forma en que la humanidad entiende a los chimpancés y la relación entre los seres humanos y la naturaleza.

Sus primeros estudios en Tanzania documentaron comportamientos inéditos de los chimpancés, como el uso de herramientas y complejas interacciones sociales, mostrando que los animales poseen emociones y personalidades propias. Estos hallazgos revolucionaron la ciencia y la ética en el trato hacia los animales.

Más allá de la investigación, Goodall dedicó su vida a la educación ambiental y la conservación de hábitats, fundando programas como Roots & Shoots, que inspiran a jóvenes de todo el mundo a involucrarse en causas ambientales y humanitarias. Su mensaje principal siempre fue que la protección de la biodiversidad es una responsabilidad de todos.

Nacida en Londres en 1934, Goodall dejó un legado que trasciende la ciencia: promover la empatía hacia los animales, el cuidado de la Tierra y la participación activa de la sociedad en la preservación del planeta.