El exgobernador de Puebla, Mario N., obtuvo un amparo federal que le permite restablecer comunicación con sus familiares y abogados, luego de haber permanecido incomunicado tras su reingreso al penal federal del Altiplano, en el Estado de México, el pasado 2 de abril.

De acuerdo con su defensa, el recurso fue promovido el 14 de abril para cuestionar las restricciones impuestas desde su traslado al Centro Federal de Reinserción Social número 1, donde estuvo más de dos semanas sin contacto con su entorno cercano. La situación fue considerada por sus abogados como una violación a sus derechos humanos.

Un juez federal concedió la suspensión de plano, medida que garantiza su derecho a establecer comunicación con su familia y equipo jurídico mediante llamadas telefónicas desde el centro penitenciario.

Mario N. se encontraba en prisión domiciliaria desde septiembre de 2023 en su residencia de Xilotzingo, Puebla, antes de ser reingresado al penal de máxima seguridad. Su proceso penal continúa abierto por el delito de tortura en contra de la periodista Lydia Cacho.

La periodista dio a conocer que, tras una apelación, dos de los tres magistrados que revisaron el caso determinaron que el exmandatario representa un riesgo, razón por la cual fue revocada la medida cautelar que le permitía permanecer en su domicilio.

En respuesta, el gobernador de Puebla, Alejandro Armenta Mier, expresó respeto por las resoluciones judiciales y reiteró que su administración se mantiene enfocada en temas prioritarios como seguridad, salud y medio ambiente.