El gobierno de China informó que impondrá aranceles de hasta 34.9 % al brandy importado desde la Unión Europea, medida que entrará en vigor a partir del 5 de julio. Esta decisión surge tras una investigación por presuntas prácticas de dumping en el mercado chino de bebidas alcohólicas.

De acuerdo con las autoridades chinas, el objetivo de estos aranceles es proteger a los productores locales frente a la competencia desleal que representan algunas marcas europeas. El anuncio ha generado preocupación entre los exportadores de la Unión Europea, quienes ven amenazada su presencia en uno de los mercados más grandes del mundo.

Las principales empresas afectadas por esta medida son reconocidas casas productoras como Jas Hennessy, Rémy Martin y Martell, cuyos productos representan una parte significativa de las importaciones de brandy en China. Estas compañías deberán enfrentar ahora un aumento considerable en los costos de exportación.

La decisión de China se da en un contexto de crecientes tensiones comerciales con la Unión Europea, que en meses recientes también ha implementado medidas similares contra productos asiáticos. Expertos señalan que este tipo de acciones puede impactar negativamente el comercio bilateral y encarecer los productos para los consumidores.

Por su parte, la Unión Europea ha manifestado su intención de dialogar con el gobierno chino para buscar una solución negociada y evitar una escalada en las restricciones comerciales. Mientras tanto, los importadores y distribuidores de brandy en China se preparan para ajustar sus operaciones ante el nuevo escenario arancelario.