Desde Santo Domingo Kesté, Campeche, la presidenta Claudia Sheinbaum dio inicio a la entrega de recursos del Fondo de Aportaciones para la Infraestructura Social destinados a comunidades indígenas y afromexicanas. Esta inversión forma parte de un programa nacional que busca impulsar el desarrollo y bienestar en estas poblaciones históricamente marginadas.

El monto total asignado a nivel nacional alcanza los 13 mil millones de pesos, una cifra significativa que permitirá a las comunidades decidir y gestionar directamente las obras y proyectos que consideren prioritarios. La administración de estos recursos se realizará a través de asambleas comunitarias, promoviendo así la participación y la toma de decisiones colectivas.

Este modelo de gestión busca fortalecer la autonomía de las comunidades indígenas y afromexicanas, garantizando que sus derechos colectivos sean respetados y reconocidos en el proceso de desarrollo local. La presidenta Sheinbaum destacó la importancia de que las propias localidades tengan el control sobre las inversiones que impactan su entorno y calidad de vida.

Con esta iniciativa, el gobierno federal reafirma su compromiso de apoyar a los pueblos originarios y afromexicanos, promoviendo un desarrollo inclusivo y sostenible que beneficie directamente a quienes históricamente han sido excluidos de los procesos de toma de decisiones y acceso a recursos públicos.