El cuerpo calcinado de un hombre de 45 años, identificado como Jesús N., fue localizado la mañana del 10 de abril en un camino de terracería de San Mateo Matzaco, municipio de Izúcar de Matamoros, Puebla.

El hallazgo se produjo luego de que trabajadores de un cañal reportaran la presencia de un cadáver tras realizar una quema controlada durante la madrugada, una práctica común en la zona.

Autoridades ministeriales iniciaron las investigaciones para esclarecer las causas del fallecimiento, el cual fue calificado como traumático.

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El descubrimiento ocurrió alrededor de las 09:30 horas, cuando una cuadrilla dedicada al corte de caña alertó a los servicios de emergencia al encontrar el cuerpo carbonizado, boca abajo, dentro de un área delimitada con cinta roja con la leyenda “Peligro”.

Debido al nivel de calcinación, en un primer momento no fue posible determinar el sexo de la víctima. No obstante, horas más tarde un familiar lo identificó Jesús N., vecino de Matzaco, de aproximadamente 1.60 metros de estatura y complexión delgada.

Peritos y agentes ministeriales procesaron la escena, tomaron registros fotográficos, recabaron testimonios de los trabajadores y aseguraron diversos indicios para su análisis.

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El cuerpo fue trasladado al anfiteatro para practicarle la necropsia de ley, procedimiento que podría aportar información calve sobre las circunstancias de su muerte. Según los testigos, la quema del cañal se llevó a cabo conforme a los protocolos habituales, sin que notaran algo fuera de lo normal.

Mientras avanza la investigación, el caso ha generado inquietud sobre las medidas de seguridad en zonas agrícolas donde se realizan quemas controladas.

Las autoridades no han descartado ninguna línea de investigación y esperan que los resultados periciales determinen si el deceso ocurrió antes, durante o después del incendio.

Por José Torralba

Editora: Socorro Juárez

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