Lenguaje corporal, un espejo de la mente
Un estudio realizado en 2011 por científicos de la Universidad de Columbia descubrió que mentir activa las áreas del cerebro asociadas con la toma de decisiones y la cognición. Sin embargo, a medida que una persona miente más, esas áreas se vuelven más eficientes, lo que facilita las mentiras futuras. Esto explica por qué algunas personas se vuelven muy hábiles para mentir con el tiempo.