Quitarles el volante a los corruptos!
Son ellos, los titulares de la Secretaría de Transporte —ahora de Movilidad—, quienes, sin necesidad de rascarle mucho, han llenado sus bolsillos a costa de perpetuar un transporte público obsoleto y corrupto. ¿Modernización? ¿Eficiencia? ¡Claro que no! Es más fácil consentir prácticas dilatorias que seguir manteniendo sus privilegios