La felicidad, objetivo humano desde los filósofos griegos hasta nuestra era | Pienso, luego existo
El filósofo griego Aristóteles abordó qué es la felicidad y cómo alcanzarla en su libro “Ética a Nicómaco” (349 a.C.); para el pensador, la felicidad es el fin que busca todo ser humano, es decir, el bien es el mayor deseo que guía a todas las acciones humanas.
El filósofo utilizó el término griego eudemonía (eu= bien, y daimon= espíritu) que se traduce como “felicidad”, al que además se le atribuyen términos como la prosperidad, riqueza, vivir bien y florecer.
Aristóteles explica en el texto que las personas le atribuyen diferentes significados, que pueden ir desde acumular riqueza hasta gozar de una buena salud o la validación personal y la de los demás.
Sostiene también que el ser humano necesita basar su vida en acciones virtuosas, sustentadas en el pensamiento, la justicia y la razón.
Identifica tres formas de vida que buscan la felicidad. La primera está guiada por el placer en el que la felicidad se encuentra en la satisfacción de los impulsos. Para el filósofo, esta forma de vida es similar a la de los animales.
La segunda es la vida política, en la que el individuo busca la felicidad a través de los honores, las grandes hazañas y las riquezas.
La tercera es considerada la forma más alta de vida, denominada por Aristóteles como contemplativa. En esta modalidad, el individuo actúa de forma puramente racional y entiende que la felicidad es un fin en sí mismo, es decir, no son necesarias herramientas como el dinero o el poder para alcanzarla.
Desde la muerte de Aristóteles han pasado más de 2,300 años y en esta era nos seguimos preguntando cuáles son las claves para obtener la tan anhelada felicidad. En esta edición, Patricio Aguilar Delgado, comentarista y periodista deportivo, nos comparte una faceta distinta a la de los micrófonos y cámaras, en la que se ha desarrollado durante más de 30 años.
Para el comunicador, la felicidad es finita y momentánea; y la clave es llenar la vida de momentos felices, provocarlos y sumarlos.
“Disfrutar lo que se hace, es momentáneo, se termina y comienza de nuevo, así se van acumulando experiencias plenas”, explica el conductor de televisión.
Asegura que la felicidad se va rápido y es responsabilidad propia acumular el mayor número de momentos felices.
Aguilar Delgado recuerda cómo desde pequeño soñaba con correr tras un balón de fútbol, llegar hasta la portería, sorteando a los demás jugadores y escuchar de la afición el anhelado ¡Gooool! Sin embargo, a pesar de los intentos, el esfuerzo y el deseo por sobresalir como deportista, no se cumplió.
Lo interesante, fue que en el camino Patricio, “Pato” (como lo llamamos en los medios informativos) descubrió su vocación, encontró una forma de vida y la clave para ser feliz con su misión, que es la de conectar las emociones de los deportistas con los aficionados.
La pasión, la entrega, las emociones que ha vivido durante varios mundiales, transmitiendo competencias e historias de vida, también le permitieron encontrar la manera de compartirlo con los demás. Ahora, también es conferencista.
Patricio lleva a las escuelas, empresas y grupos interesados en conocer más acerca de la felicidad y su propia historia de vida la charla denominada: “Cumple tu sueño, 10 razones para amar lo que hago”.
Relata la vida de diez atletas, cuyas experiencias de vida también cambiaron el rumbo profesional y personal del comentarista poblano. Cada uno tiene un valor y una palabra clave que va conformando una historia que buscaba un ideal, que no llegó a conformarse.
Todos ellos intentaron con todo el corazón, convertirse en el sueño que tenían de niños, sin embargo, terminaron encontrando la plenitud y un camino distinto, que sin duda les dio muchas más satisfacciones. La plática se adapta al público meta y se estructura en tres partes.
Durante sus conferencias, el periodista comparte su trabajo a la par de las historias de los atletas, que fueron clave para su desarrollo personal; con el fin de dejar de manifiesto que todos podemos lograr nuestros sueños y hasta superar las expectativas, a veces, de una manera irónica “se gana perdiendo”, y el rumbo cambia.
Patricio se identifica con la frase: “la felicidad no es un destino, sino un medio de transporte”, y recuerda cómo dos íconos del mundo del deporte fueron decisivos en su vida, ellos son Héctor Miguel Zelada y Fernando Schwartz.
“La vida fue tan sabía, que, en el camino de intentar ser un futbolista, encontré las puertas abiertas para poder compartir emociones”, finaliza.
¿Qué es la felicidad? Y ¿existe un secreto para obtenerla?, son preguntas que han ocupado a filósofos e investigadores por cientos de años. Tan importante es que se considera una meta humana fundamental y tiene su propia efeméride: el Día Internacional de la Felicidad.
La conmemoración tiene lugar el 20 de marzo de cada año. Fue promulgada por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 2012 para “reconocer la relevancia de la felicidad y el bienestar como aspiraciones universales de los seres humanos y la importancia de su inclusión en las políticas de gobierno”.
Cada año se publica el “Informe mundial de la Felicidad” coincidiendo con la celebración del Día Internacional. Conforme a ese listado, que es resultado de evaluaciones de vida autoevaluadas promediadas durante los años 2021-2023, este año los 10 países más felices del mundo son los siguientes:
1. Finlandia.
2. Dinamarca.
3. Islandia.
4. Suecia.
5. Israel.
6. Países Bajos.
7. Noruega.
8. Luxemburgo.
9. Suiza.
10. Australia.
Y usted, ¿qué tan feliz se encuentra?
Por: Adela Ramírez