Karma, le dicen | Tremores
Tremores. Cuando se hacen las cosas mal, mal salen, es una frase que decía el abuelito del que esto escribe. Y se aplica con todas sus letras a la elección de la dirigencia del Partido Acción Nacional en Puebla. El grupo que comanda la sociedad secreta de El Yunque no pudo, ni siquiera eso, ganar la elección de este domingo. Ni porque fue hecha como traje a la medida de este grupúsculo. No fue necesaria la votación abierta a la militancia. Rechazaron a los que no pensaban como ellos. Y tampoco pudieron aún con la intervención del Comité Ejecutivo Nacional. Ya saben de quién hablamos. El morenovallismo sigue dominando las estructuras del blanquiazul, a pesar de que ya no está vivo el tlatoani, pero sus huestes mantienen injerencia, y el ejemplo se dio en la operación política que realizaron antes del proceso. Mario Riestra y Genoveva Huerta tendrán, ahora, la dura labor de ser una verdadera oposición, esperemos que no sea la clásica reaccionaria, sino que propongan un modelo de gobierno distinto. Como era de esperarse, el derrotado Felipe Velázquez, el más débil eslabón de la cadena yunquista, no reconoció que perdió e irá a las instancias judiciales, que sólo serán para confirmar el triunfo. A ver cómo le va al PAN, que tiene mucho que hacer de cara al primer proceso, en forma, que enfrentará: la elección intermedia de 2027.
¿O no?
Escisión a la vista
No obstante que el proceso, por supuesto, estuvo relativamente tranquilo, hay varios damnificados azules que están inconformes con el resultado. El primero, obvio, el perdedor, pero también quienes acusan que hubo interferencia del CEN blanquiazul, aunque haya ganado el grupo contrario. Quien le puso el cascabel al gato fue la exdiputada Mónica Rodríguez Della Vecchia. En su cuenta de la red social Equis, sentenció: “Ahora si y de una vez por todas cumplan su amenaza, arránquense para @MovCiudadanoMX compadres!!!!”. Como dicen los bisteces cuando los fríen: tsssssss. Pero no sólo eso. En respuesta a una misiva que mandó el candidato perdedor, Eduardo Rivera, a quien fuera su contrincante en las elecciones a la gubernatura, Alejandro Armenta, la exlegisladora se fue a la yugular: “Hoy México requiere de una oposición de políticos valientes y responsables que estén a la altura, que vean por el interés colectivo y no personal. Que no pacten y amenacen cada tres años con irse a otro partido. Con esta carta quedan claros los motivos de la derrota de @eduardorivera01 el pasado 2 de junio”. Doble tssssss. Se llevan pesadito los panistas cuando hace falta un pastor.
¿O no?