Preparación para gobernar | Tremores
Tremores. El gobernador electo de Puebla, Alejandro Armenta, será, a partir del 14 de diciembre, el primer mandatario con grado de Doctorado. Y en la historia reciente, ha habido titulares del Ejecutivo con una diversidad de preparación académica, pero ninguno con este nivel. Desde abogados, economistas, politólogos, diseñadores, especialistas en Ciencias Sociales, y la gran mayoría tiene la licenciatura, máximo una maestría. Por ello, resalta que, ahora, con esta preparación, arribe a la Primera Magistratura del estado para no solamente ser el administrador, sino aplicar una verdadera política social basada en análisis, estudios y comprobaciones que le dio el recorrido por la geografía poblana en los últimos, por lo menos, 15 años. Al defender su tesis doctoral “La Bioética Social en el Estado de Derecho para la consolidación de un Modelo de Seguridad y Justicia: Estudio de Caso Puebla”, indicó a los sinodales del Instituto Nacional de Administración Pública (INAP) la importancia de un liderazgo fundamentado en principios bioéticos y en un enfoque humanista. Es decir, cumpliendo con los preceptos de la Cuarta Transformación, que ahora encabeza la presidenta Claudia Sheinbaum. “Este modelo prioriza la autonomía de los derechos sociales, la sustentabilidad frente al cambio climático, la beneficencia para atender las necesidades básicas de la población y la justicia mediante la protección de los recursos públicos”. Ese es el nivel de relevancia que la entidad sea gobernada por un, literal, doctor, luego de prepararse en la universidad pública, la BUAP, para estudiar la licenciatura en Administración Pública; además, tiene la maestría en Administración Pública de Calidad en la Gestión Pública Local por el IAP. Por supuesto, en este momento tan importante, estuvo acompañado de su familia: su esposa, Ceci, y sus hijas Cristy y Ceci. Ya sólo faltan 23 días para que asuma las riendas de Puebla.
¿O no?
Editor: Fabián Sánchez