La llamada transición femenina en Estados Unidos, con Kamala Harris, como posible candidata a la presidencial del Partido Demócrata comienza a tomar forma. Y hay condiciones para restarle votos a Donald Trump. Incluso con México hay ánimo en la cuatroté por tener una aliada en el vecino país del norte.

De acuerdo a los análisis y las encuestas, el Partido Demócrata está justo en la línea para revertir la popularidad de Trump y Harris lidere las encuestas. A esto se suma un buen momento para que una mujer pueda gobernar Estados Unidos, ya que en México se dio esa transición desde el pasado 2 de junio.

Aun así la vicepresidenta Kamala Harris debe asegurar el apoyo de los casi dos mil delegados demócratas para obtener la candidatura de su partido, pues la eventual campaña de Harris se daría cuesta arriba debido a que no solo tiene en su contra el tiempo sino también la tradición conservadora de Estados Unidos.

En México, la virtual presidenta Claudia Sheinbaum, hasta el momento, lleva dos conversaciones con Harris y de la reciente postulación de la vicepresidenta, “le da gusto”, que como mujer vaya por un cargo de gran relevancia.

Sin embargo, Estados Unidos es conservador y no hay una agenda de género e incluso parece que el tema de paridad política es más avanzado en México. Además, el problema no es solo el tema racial y de género sino la agenda radical y progresista que tiene y que no es un tema ni popular ni fácil de abordar en el país. En cambio, la estridencia de Trump tiene más eco en la agenda norteamericana.

Y es que el candidato republicano cuenta con el apoyo de la mayoría de los estados del oeste del país y prácticamente con la totalidad del sur, los demócratas esperan el respaldo de las regiones de la costa oeste y el noreste del territorio, así como de las zonas urbanas en algunas de las entidades clave.

Aunque Harris no la tiene fácil, ya que solo es evaluada por sus responsabilidades directas sino también por su rol en un gobierno que, se percibe, obtuvo malos resultados económicos, pocos avances legislativos y una presencia “torpe” en el escenario global.

Con México hay tímidos avances, en su momento, Harris felicitó a Sheinbaum tras su triunfo en una charla le expresó continuar con la relación entre México y EU, la migración, uno de los más importantes entre los esos países, así como el comercio. En esa conversación Harris “reafirmó la importancia de mantener una fuerte asociación y amistad”.

Discutieron la profundización de la relación entre EU y México para abordar las causas fundamentales de la migración, fortalecer los lazos comerciales y el crecimiento económico, y combatir el tráfico de personas, drogas ilícitas y armas de fuego. También hablaron de la importancia de que las mujeres ocupen puestos de liderazgo y el empoderamiento de mujeres y niñas.

Ahora, Sheinbaum Pardo explicó que como mujer le da gusto que más mujeres aspiren a los más altos cargos públicos o que compitan por la Presidencia. Recordó que la primera mujer candidata en de la Unión Americana fue Hilary Clinton.

Y el empoderamiento de las mujeres está en la agenda político-electoral de este año y Kamala Harris tiene, por lo menos, un guiño de la cuatroté.

Israel Mendoza Pérez

@imendozape